Muchos de nosotros aseguramos que somos buenos profesionales en nuestro sector, pero ¿hasta que punto es cierto?
En estas fechas tan señaladas, el que más y el que menos se toma un par de copas con sus compañeros de oficina y sin saber como, resulta que se le ha ido la lengua más de la cuenta y acaba contando y difundiendo todo tipo de cotilleos y rumores sobre compañeros y sobre todo del jefe que es, más que nunca, el centro de todas las conversaciones.